Dice Collboni que la Copa América, el desfile de Louis Vuitton en el Park Güell o la Fórmula 1 encajan perfectamente en la escala humana de la ciudad, y por eso quiere abrir 5.000 plazas hoteleras más. Camas de hotel, no colchonetas para tu hija que se ha quedado sin plaza en la guardería pública. Para eso nace Bressols en Lluita, formada por familias preocupadas por la falta de garantía de acceso a los cuidados a los seres humanos entre 0 y 3 años. Quien, por no tener, no tiene ni servicios, es la población de Gaza. Pero como nuestros políticos no hacen nada para parar el genocidio al que dicen oponerse, se ha lanzado una campaña de recaudación de fondos para movilizar a la población y que los gobiernos hagan algo, además de hablar. Pero si no me sigues, no te preocupes, porque dos noticias juntas se entienden mejor: el Ayuntamiento convocó un minuto de silencio por los seis asesinatos machistas ocurridos el fin de semana en distintas ciudades entre las que no estaba Barcelona; sin embargo, no ha convocado ninguno —ni tampoco anunciado ninguna medida— después de que dos hermanas se suicidaran en el barrio de Navas dos horas antes de ser desahuciadas. Cada vez somos más las que no encajamos en la escala (¿humana?) de la ciudad.