
Sin hilo, pero con conductor
Subiros al tren, que nos espera un viaje cultural bien bonito esta semana:
Setmanes d’Arquitectura, Fira Literal
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Hay agendas y agendas. Hay agendas muy completas con eventos para todos los gustos y bolsillos y luego está esta, con huecos, incompleta e imperfecta, porque me he ido de vacaciones para ver a mis padres (¡los he visto tan viejos y frágiles!) que viven en Hamburgo donde la primavera –cuando salga el sol– es un puto festival. Y un festival también es esta pequeña selección de eventos culturales:
Quizá, quizá: el dúo Alosa en Casa Elizalde.
Subiros al tren, que nos espera un viaje cultural bien bonito esta semana:
¿Qué pasaría si impusieran aranceles del 25 % sobre la cultura importada? ¿La cultura catalana se volvería ‘genial de nou’? Més genial que ara? No ho crec. La Condal se viste con un tejido cultural tanto tradicional como internacional, tan multicultural, fuerte y con tanta alma propia, que esta pregunta no surge y la respuesta no interesa. Lo que sí que podría interesar es…
La cultura en enero es un poco como el tomate de invierno: añade color, pero poco sabor. O eso pensaba mientras miraba mi cuenta bancaria (a fin de mes no llego, ni de broma) y negaba con mi cabeza por el saludo nazi de Musk (solo es el hombre más rico del mundo, no pasa nada).